“Me encontraba de camino a casa, salí de la universidad y espere para tomar mi transporte como todos los días, nada fuera de lo normal y entonces un sujeto se acerca a mí y me pregunta la hora pero observándome de pies a cabeza y acercándose a más no poder, decidí alejarme mientras todos veían”.
“El tipo me sigue y me ve el pecho con mirada penetrante, me dice que si quiero una bebida que él me la invita, le digo que no y comienza a acercarse cada vez más para en una ocasión intentarme besar, no saben el asco y la incomodidad que sentí, se los juro sientes una impotencia enorme y ¿saben qué es lo peor? Que había un sin fin de gente ahí mismo que solo me miraba en lugar de decir algo”, escribió.
“… ¿Tenemos que esperar a que pasen actos de mayor gravedad para empezar a reaccionar gente?”, así cerró su comentario en redes.