Interjet es declarada en quiebra; ordenan remate de sus bienes

La empresa fundada por la familia Alemán y comprada por Alejandro del Valle, Interjet, fue declarada de forma oficial en quiebra por un juez, quien también ordenó rematar los bienes de la aerolínea con el fin de saldar los adeudos que tienen con acreedores.

El Juez Segundo de Distrito en Materia de Concursos Mercantiles declaró abierta la etapa de quiebra, después de un concurso mercantil que no consiguió la reestructura de la línea aérea, sobre la que se acumulan adeudos superiores a los 40 mil millones de pesos.

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Interjet detuvo sus vuelos en diciembre de 2020 y se declaró en huelga el 8 de enero de 2021, dejando a más de 6 mil empleados sin trabajo. Con la decisión del juez al ordenar la venta de los bienes, se pretende que los trabajadores reciban al menos una parte de lo que la empresa les debe.

Es así que, tendrán que ratificar a Gerardo Sierra como síndico al conciliador, o en todo caso, elegir uno diferente, para reanudar la venta de bienes de la compañía. 

“Se ordena al síndico que de inmediato a partir de su designación, inicie las diligencias de ocupación, mediante inventario, de libros, papeles, documentos, medios electrónicos de almacenamiento y proceso de información, existencia de caja y todos los bienes de la comerciante”, apuntó el juzgado.

Interjet es declarado en quiebra

Cabe señalar que Alejandro del Valle compró Interjet en julio de 2020 por 150 millones de dólares. Luego, la organización mantuvo las operaciones hasta diciembre, cuando ya no pudo cubrir los costos de turbosina y servicios aeroportuarios, situación que repercutió en miles de pasajeros.

A pesar de que la flota de la empresa rondaba las 60 aeronaves, finalmente, la operación se llevó a cabo con cuatro aeronaves de origen ruso que eran atendidas por una plantilla de más de 6 mil pasajeros.

Con la decisión del juez, las posibilidades de recuperar Interjet desaparecieron. Los trabajadores contaban con un laudo que orillaba a los dueños de la compañía a pagar más de mil 400 millones de pesos en sueldos no devengados y otras prestaciones que no fueron entregados por la empresa al fisco.