Marcelo Ebrard alerta sobre cobro de aranceles a productos mexicanos en EU

Marcelo Ebrard, secretario de Economía, presentó un informe sobre las posibles afectaciones a Estados Unidos, si el gobierno del presidente electo, Donald Trump, decide imponer aranceles del 25 por ciento a las importaciones de productos mexicanos.

En conferencia de prensa, el funcionario resaltó que no es la primera vez que se trata de poner aranceles más altos a México. El último intento fue en 1971 con el mandato de Richard Nixon. 

Te podría interesar: México líder en comercio digital

Sin embargo, el secretario alertó que “los efectos podrían ser mucho mayores”, pues en aquel entonces no solo era un impuesto del 10 por ciento, sino que solamente se importaba el 3.4 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB).

En la actualidad, la Unión Americana importa 12.7 por ciento del PIB. Es decir, el impacto sería cuatro veces más grande, además de que los aranceles alcanzarían al 25 por ciento. “Sería cuatro veces mayor, más el doble”.

Marcelo Ebrard advierte consecuencias sobre cobro de aranceles a productos mexicanos

Más adelante, Marcelo Ebrard comentó que no solo los gobiernos se verían afectados, también empresas, industrias y tecnológicos. Especialmente automotrices como General Motors, Stellantis y Ford.

“Son las tres empresas establecidas en México. Por cierto, recordar que la primera planta de Chrysler se fundó hace 80 años en México. Ford Motor Company llegó hace casi un siglo”. 

• Suscríbete a nuestro canal de WhatsApp y sigue la información más de cerca

“Estamos hablando de empresas que son comunes en función de esa integración de esa antigüedad y que producen un número impresionante de vehículos y que son competitivas con todo el mundo”.

“Cuando dice el presidente Trump ‘voy a ponerle a México 25 por ciento porque exporta demasiado a Estados Unidos’, lo que está diciendo es ‘dear, fellows, impondremos impuesto a las empresas norteamericanas más importantes del mundo de 25 por ciento”.

 Asimismo, el funcionario destacó que ambos países, al igual que con Canadá, están muy integrados, por lo que el impuesto que afectaría a muchos sectores. “Primordialmente, a estas compañías industriales y tecnológicas, porque son las principales exponentes de Estados Unidos. Es un tiro en el pie”. 

Igualmente, las medidas recaerán en el consumidor estadounidense y las compañías, puesto que se perderían alrededor de 400 mil empleos, de acuerdo con la consulta que hizo el gobierno con diferentes empresas automotrices y de autopartes.