Cuando los menores tienden a navegar por internet, la actitud natural de los padres es querer saber lo que hacen y advertirles de posibles engaños. Sin embargo, parece que los padres son los menos preparados en cuanto al conocimiento de tecnologías y de habilidades para manejar algunas de las tantas Redes Sociales: Faceboook, Twitter, correo electrónico, Instagram, Hi, Youtube, Vimeo, WhatsApp, Messenger, Blog personal, Tuenti, Google+, Snapchat, SimSimi, LINE y otras más. Aunado a esto, los padres suelen ser el principal problema de los menores dada las restricciones, castigos, prohibiciones y sanciones que suelen aplicar. Nada más terrible para un adolescente el tener bloqueado el acceso a esta “importante herramienta de comunicación y socialización juvenil” por más de 24 horas.