Siempre he tenido un gusto por la colección de algunos objetos que me recuerdan viajes, experiencias y momentos. Entre esas colecciones, tengo unas plumas promocionales. También, una gran cantidad de tarjetas de hotel (gracias a mi amigo Eduardo Carrete), y mi museo de teléfonos celulares. Desde aquel primer Motorola, que en 1992 renté a Portacel, hasta mi primer ‘smarphone’ GPRS que quedó vivo, un Nokia 9300 (el tipo James Bond). Desde entonces, me hice partidario de Android, allá por 2009, con teléfonos HTC, pasando por Motorola, hasta que llegué a Samsung, empezando con el S3, S4 y ahora el S6 Edge+.
Muchas veces me he visto tentado por Apple, con sus iPod Touch, iPhone 6S y Air Play. En fin, productos que por su innovación, diseño y funcionalidad, llaman la atención. Sin embargo, cuando hay un evento como #MadeByGoogle, de este 4 de octubre, vuelvo a ver a Google como una empresa que no únicamente marcó un antes y después en la historia de la funcionalidad de búsquedas en internet y su comercialización mediante técnicas cómo el SEO (Search Engine Optimization) o el PPC (Pay per Click), sino como una empresa con proyectos tan grandes y variados, que nos permiten visualizarla ahora entre las líderes en AI (Inteligencia Artificial) y, por supuesto, en la manufactura, distribución y venta de productos electrónicos.
Este 4 de octubre fue el evento de presentación de sus más recientes productos: El Smartphone de Google, Pixel 2, que nos tomará un número de #MentesDigitales para hablar de las características y beneficios, los nuevos audífonos con capacidad de traducción, bocinas inalámbricas, y una ‘tablet’ que tiene, al igual que toda la gama de Google, una gran capacidad de interacción, una cámara que se dispara con la instrucción de la voz y la ‘laptop’.
Sí, Apple es grande, pero mi decisión, hasta hoy, sigue siendo Android. Así, entre el Samsung Note 8.0 y Pixel 2, va a ser una decisión aún más difícil.