Epílogo. La “calidad de vida” es un concepto equívoco, porque las carencias de salud no pueden ser el criterio para eliminar la vida humana. Basados en esa noción de calidad de vida, los médicos y jueces del caso de Alfie, acaban de repetir lo que hicieron los nazis, cuando eliminaron a muchas personas minusválidas bajo el “parámetro” de que eran de raza inferior. Por eso, la vida humana y la dignidad de la persona son lo criterios reales que hay que retomar.