Comerciantes, constructores, habitantes y autoridades locales, requieren conversar para determinar nuevos reglamentos urbanos para contrarrestar estos efectos. Asimismo, repensar formas nuevas de encausar el agua en estos casos y verificar qué le toca a cada actor y qué se requiere como políticas públicas locales o hasta federales. Los problemas pueden ser un motor de unidad para sobrepasar la crisis. Usted ¿Qué opina?