Esta semana dos titulares han impactado los diarios y a sus víctimas: Los golpes a Melanie y el fraude de la pseudo psiquiatra Marilyn Cote
18 de noviembre 2024
Seth Pérez
Esta semana dos titulares han impactado los diarios y a sus víctimas: Los golpes a Melanie y el fraude de la pseudo psiquiatra Marilyn Cote. En ambos casos surge la pregunta: ¿existieron señales para pensar que se podría llegar a las consecuencias vistas? En el caso de Cote hay denuncias de que no tenía título desde hace dos años, así como varios pacientes que se quejaron en redes sociales. En el otro caso contó la agredida que había sufrido violencia muchas veces antes y narró cómo ese día tocó indebidamente a una amiga.
En ambos casos la evidencia es contundente. Dos lecciones surgen de estos casos: 1) Prevenir y actuar cuando seamos testigos de conductas de riesgo y 2) Investigar qué provoca estas conductas para atacar la raíz y no solo el efecto. Una teoría muy vieja apunta que los criminales se identifican por su morfología o su propensión en su ADN, pero ya sabemos qué hay factores que motivan y otros que desencadenan.
La violencia en la mayoría de ocasiones viene de otra violencia anterior y por lo general una injusticia también. No es una justificación ni las teorías pretenden evitar el castigo. Todo lo contrario, el objetivo es buscar patrones que verdaderamente ayuden de raíz a prevenir. De otra forma nos quedaría pensar que es solo suerte ser víctima o victimario. ¿Usted qué opina?