Las dietas basadas en plantas (DBP) son todas aquellas dietas que incluyen alimentos de origen vegetal en forma de: frutas, verduras, leguminosas, cereales, nueces, tubérculos, raíces, hojas y semillas; asimismo, incluyen alimentos procesados como panes, pastas, cereales para el desayuno, verduras y leguminosas cocidas y fermentadas, conservas, purés, jugos y mermeladas; también se incluyen alimentos derivados de plantas como aceites de semillas oleaginosas, azúcares y algunas hierbas y especias. Bajo esta definición, existen varios tipos de dietas que son consideradas “basadas en plantas”, estas incluyen: la ‘dieta mediterránea’, la cual es una dieta que promueve el consumo de frutas y verduras, además de pescado azul, aceite de oliva, vino tinto, carnes magras, nueces y productos lácteos bajos en grasa; las dietas vegetarianas, que pueden o no incluir alimentos de origen animal, por ejemplo la ‘lactovegetariana’, la ‘ovovegetariana’ y la ‘ovolactovegetariana’, donde se consumen, además de alimentos de origen vegetal, lácteos, huevo o ambos respectivamente; las dietas veganas, que se caracterizan por excluir, por completo, alimentos de origen animal incluyendo productos como la miel de abeja; por último, la ‘dieta vegana cruda’, la cual se basa en alimentos vegetales crudos, donde se pueden incluir leguminosas germinadas y alimentos fermentados, pero el porcentaje de alimentos sin cocción puede ser desde el 75 hasta el 100 por ciento de la dieta. En realidad, una DBP es cualquier dieta donde se favorece el consumo de alimentos de origen vegetal sobre los de origen animal.