Con una audiometría conocerá el alcance de la pérdida auditiva neurosensorial, indicando el tratamiento adecuado que puede variar entre el uso de auxiliares auditivos para amplificar el sonido, o ser candidato a un implante coclear, en caso de que la pérdida sea grave, con la finalidad de que le ayude a estimular las conexiones auditivas con el cerebro.