El cardenal Reinhard Marx, arzobispo de Múnich, dijo al diario Sueddeutsche Zeitung que “sería mejor para todos crear la posibilidad de sacerdotes célibes y casados”. Sus palabras se producen luego de que su diócesis se viese sacudida por un reporte independiente sobre la gestión de los casos de abusos sexuales en las últimas décadas, que culpó a Marx y sus predecesores, incluyendo el papa emérito Benedicto XVI.