Un informe realizado por la consultoría McKinsey Global Institute menciona que entre 400 y 800 millones de personas en todo el mundo tendrán que buscar una nueva ocupación desde hoy hasta el año 2030 debido a la automatización en los trabajos; en México, el impacto será menor por los bajos sueldos, del total de 68 millones de personas que formarán la fuerza laboral mexicana para ese año, unos 9 millones se verán desplazadas.
McKinsey analizó que los cambios tecnológicos afectaran más a los trabajadores con pocos estudios y menos con formación universitaria y posgrado, las actividades más golpeadas por la robotización están relacionadas con el esfuerzo físico: los operadores de máquinas, empleados de comidas rápidas y trabajadores que procesan datos.
Los servicios será el sector que adoptará esa mano de obra poco calificada, los trabajadores seguirán siendo vulnerables a la mejoría de su calidad de vida y sólo quienes valoren ese trabajo podrán recompensar económicamente ese tipo de actividades.
La consultoría destaca que, aunque los anteriores cambios tecnológicos no han llevado a una pérdida de trabajos, si han cambiado el mercado laboral, hasta el año 1970 el progreso tecnológico desplazó trabajos que exigían fuerza física, pero creo una gran demanda de empleos y capacitación relacionados con la operación de los nuevos equipos, por lo que los trabajadores se vieron en la necesidad de aprender nuevas habilidades.
Las ganancias generadas por el aumento de productividad deben ser utilizadas en mejorar la calidad de vida y ofrecer beneficios a los trabajadores, por ejemplo en entrenamiento para que se adapten a los cambios introducidos por la robótica e inteligencia artificial, en mayores sueldos y más tiempo de jubilación.
Pese a lo mencionado anteriormente, los analistas e investigadores puntualizan que la innovación, el crecimiento económico adecuado y las inversiones pueden generar una creación de empleos suficiente para compensar los puestos que serán perdidos por la automatización, el reto es alcanzar la fusión de la tecnología, el empleo y la productividad.