Anúnciate aquí

Tercer ola de COVID-19 redujo 17% expectativa de vida de adultos mayores

La esperanza de vida entre los adultos mayores –en caso de enfermar– se ha reducido en 17 puntos. (Cuartoscuro)
La esperanza de vida entre los adultos mayores –en caso de enfermar– se ha reducido en 17 puntos. (Cuartoscuro)

Redacción La pandemia por COVID-19 sigue siendo mucho más letal entre personas mayores, a pesar de que 40 por ciento de la población mexicana que se está contagiando tiene hasta 29 años, alertó el doctor Roberto Gutiérrez Rodríguez, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Entre el 4 de abril y el 12 de agosto … Leer más

Redacción

La pandemia por COVID-19 sigue siendo mucho más letal entre personas mayores, a pesar de que 40 por ciento de la población mexicana que se está contagiando tiene hasta 29 años, alertó el doctor Roberto Gutiérrez Rodríguez, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Entre el 4 de abril y el 12 de agosto de este año, la tasa acumulada de letalidad por el coronavirus bajó de 9.1 por ciento a 5.4 por ciento, pero registró un incremento severo en el rango de 75 años de edad en adelante, al subir de un promedio de 43 a 60 por ciento.

El jefe del Departamento de Economía de la Unidad Iztapalapa de la UAM precisó que en la tercera ola, la esperanza de vida en ese sector –en caso de enfermar– se ha reducido en 17 puntos, de 57 a 40 por ciento, mientras que en el de cero a 29 años, la tasa pasó de 0.9 a 0.3 por ciento, lo que implica un aumento de 0.6 por ciento en la esperanza de vida.

Dada esta experiencia, lo ideal sería ajustar las prácticas sanitarias de tal manera que no sólo sean pocos los adultos mayores que se contagien, sino también que fallezcan, pues de otra manera se les estará condenando al encierro en sus casas, a pesar de las vacunas, en contraste con lo que sucede con los jóvenes, incluso si no se han inoculado, consideró.

Si bien los biológicos han contribuido a que la gente se infecte menos del virus, éste genera un reto nuevo debido a que al alojarse, en particular en quienes no están protegidos, sobre todo niños y jóvenes –con alta probabilidad de requerir servicios médicos estrechos e incluso equipo de cuidados intensivos– disminuirían las posibilidades de que individuos de edad avanzada sean atendidos.

Como parte del seguimiento del COVID-19 en dicho Departamento de la Unidad Iztapalapa y del análisis de estadística descriptiva y comparada sobre infectados y fallecimientos, se separaron las tendencias observadas en dos etapas.

En la primera parte, los afectados se concentraban en el segmento de 30 a 49 años (41.8 por ciento del total) y de 50 años y más (35.7 por ciento); en un periodo intermedia, del 4 de abril al 13 de julio, bajó a 68 por ciento y en el último, del 13 de julio al 12 de agosto, a 39.8 por ciento.

Esto significa que el porcentaje de niños y jóvenes (cero a 29 años) pasó de 22.5 por ciento en la primera etapa a 32 en la intermedia y a 40 por ciento en la tercera, con un promedio de edad de 32 a 27 años y el registro de los fallecidos de 50 años y más bajó de 83.8 por ciento en la primera a 84.3 por ciento en la segunda y a 76.5 por ciento en la tercera, reduciéndose el promedio de edad de los muertos, de 63 a 62 años.

En términos absolutos, en el primer periodo perdieron la vida 107 mil 348 mexicanos de 75 años y más, y en el segundo 46 mil 108, es decir, casi 8 mil 600 y 11 mil 527 por mes, respectivamente; el total de niños muertos de cero a cuatro años fue de 323 en el primer periodo y de 59 en el segundo, alrededor de 26 y de 15 al mes, en cada caso.

El doctor Gutiérrez Rodríguez indicó que este cambio estructural en los contagios no se ha traducido en menores niveles de letalidad entre los adultos mayores, sino en un incremento.

Anúnciate aquí

Anúnciate aquí

Anúnciate aquí