Con espolones de gallo
Esto se terminó, por lo menos, hasta finales de julio, si es que otra cosa no sucede y se llevan al equipo de Querétaro. Cómo ya lo habíamos comentado, no hay nada que reprochar, se hizo mucho con poco, definitivamente, dado el plantel, se llegaron a instancias que al principio del torneo no las habíamos imaginado siquiera y sin embargo ahí estuvimos, aunque fuera por un ratito, que nos hicieron ilusionar.
Del partido contra Necaxa, poco que señalar, más allá de que se les hizo un buen partido y que nos quedó la sensación que pudimos haber hecho algo más durante los 90 minutos para no llegar a los penales, donde fallamos tres de cinco, ¿qué podemos decir de más al respecto?
¿Qué sigue? Bueno, a lo que ya estamos acostumbrados, el desmantelamiento de nuestro equipo por parte de Tijuana, donde se llevarán a los mejores y nos mandarán a los peores, como cada fin de torneo. Seguramente, Gerk (que no Guerk) seguirá en los controles junto con su cuerpo técnico, rumiando de coraje de que le quiten jugadores y solo le manden las sobras, no solo de los Xolos, sino de otros conjuntos. Así las cosas, y como dijera el clásico… “es lo que hay”.
Vendrán rumores, rumores y más rumores, hay otras plazas que se ilusionan con tener Primera División, porque dicen “merecerlo” y voltean a Querétaro, argumentando que somos una plaza mediocre que no merecemos la categoría, etcétera, pura palabrería, porque si analizaran de fondo, encontrarían que lo único mediocre que hay aquí… es la directiva.
¡Nos leemos hasta julio!