Traicionado por aquellos en quienes confiaba y encarcelado injustamente en la aterradora prisión de Château d’If, Dantès pasa catorce años en cautiverio. Allí, su compañero de celda, Abbé Faria, no solo le enseña sobre el mundo exterior, sino que también le revela la ubicación de un tesoro oculto en la isla de Montecristo.