Crean nuevo método para rastrear dopamina en cerebro por más de un año

Se fabricaron sensores nuevos que rastrean los niveles de dopamina en el cerebro, facilitando el monitoreo a pacientes con Parkinson, esquizofrenia y depresión

En manos de los Neurocientíficos del Instituto Tecnológico de Massachusetts que se encargaron de fabricar los sensores mismos que ayudan a indagar sobre el papel de la dopamina en los cerebros sanos y enfermos, según lo mencionaron en un comunicado.

La dopamina, es importante para la regulación del estado de ánimo, controlar el movimiento, además de ser un importante neurotransmisor para que las neuronas cerebrales se comuniquen entre sí.

“A pesar de todo lo que se sabe acerca de la dopamina como una molécula de señalización crucial en el cerebro, ha sido imposible controlar los cambios en la liberación en línea de la dopamina en períodos de tiempo largos como para relacionarlos con las condiciones clínicas”, dijo Ann Graybiel, una de las autoras del estudio.

En 2015, los científicos demostraron que los sensores se podían usar para medir los niveles de dopamina, en la parte del cerebro llamada cuerpo estriado, que contiene células productoras de dopamina fundamentales para la formación del hábito y aprendizaje reforzado por recompensa.

Debido al tamaño de las sondas los investigadores podrían implantar hasta 16 de ellas para medir los niveles de dopamina en diferentes partes del cuerpo estriado.

“Nuestro objetivo fundamental desde el principio fue hacer que los sensores funcionen durante un largo tiempo y producir lecturas precisas día a día”, dijo Helen Schwerdt, autora principal del artículo.

“Esto es necesario si quieres entender cómo estas señales median enfermedades o condiciones específicas”, agregó.

Los investigadores, para comprobar el desarrollo de este estudio, implantaron de tres a cinco sensores en el cerebro de los animales, se lanzaron que las mediciones de dopamina se mantuvieron constantes por más de un año.

Los científicos coinciden en que si estos sensores se desarrollan para usarse en humanos, se podría emplear para monitorear a pacientes de Parkinson que reciben estimulación cerebral profunda.

Usar los sensores para controlar los niveles de dopamina ayudaría entonces a evitar la estimulación de la misma en pacientes que no lo necesitan.

En la actualidad, los investigadores estudian la posibilidad de adaptar los sensores para medir otros neurotransmisores en el cerebro y calcular las señales eléctricas, que también se pueden alterar en el Parkinson, así como otras enfermedades.

“Comprender las relaciones entre la actividad química y eléctrica será realmente importante para comprender todos los problemas que se ven en el Parkinson”, apuntó Schwerdt.

Con información de Notimex

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