Día de los Inocentes: ¿Por qué se hacen bromas?

Este 28 de diciembre se celebra el Día de los Santos Inocentes, fecha que tiene un origen bíblico y un trasfondo trágico, contrario a lo que muchos creen y a la forma en la que se celebra.

El nombre ‘Santos Inocentes’ proviene de la forma en que llamaron a los niños asesinados por el rey Herodes en la época de la Matanza, luego de que este fuera advertido del nacimiento de el Mesías.

De acuerdo con la biblia, para evitar que el ‘Rey de los Judíos’ le arrebatara su trono, Herodes ordenó asesinar a todos los recién nacidos con la finalidad de que entre esos pequeños se encontrara el llamado Mesías.

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Tras esto y con la creencia de que aquellos bebes asesinados se encontraban libres de pecados, se les llamó ‘Santos Inocentes’ y aunque, según la biblia, esto sucedió a mediados de enero, se acostumbra celebrarlo el 28 de diciembre.

Pese al trágico origen, con el paso del tiempo se ha deformando y olvidando, volviendo esta fecha un día en el que las personas aprovechan para jugarse bromas a lo largo de la celebración.

¿Por qué se hacen broma en el Día de los Inocentes?

Debido a que con el paso del tiempo se ha ido transformando, el Día de los Inocentes se acostumbran a jugar bromas, sin embargo, esto no es nuevo, pues según diferentes explicaciones, esto proviene desde la Edad Media.

Durante la celebración de la ‘Fiesta de los Locos’, las normas sociales de la época se relajaban y las personas participaban con comportamientos cómicos, pero con el paso del tiempo, esta festividad se fusionó con la fecha cristiana, transformándose en una costumbre de jugar bromas.

No obstante, hay otra explicación que tiene que ver más con el lenguaje, pues la palabra ‘inocente’, al ser una palabra polisémica en la riqueza del vocabulario español, puede tener dos significados.

Según la Real Academia de la Lengua Española (RAE), ‘inocente’ es in término con el que se puede asociar a las personas “libres de culpa” o “sin malicia, fáciles de engañar”, por ello, al ser ‘Día de los Santos Inocentes’, se deformó su significado abriendo paso a la tradición de las bromas.