Los Tigres del Norte dominan el folclor queretano

El Estadio Olímpico fue la sede de uno de los conciertos más esperados del año. Los Tigres del Norte volvieron a la capital de Querétaro con la gira ‘Siempre contigo’, para regalarnos un espectáculo de más de dos horas con todos sus éxitos.

Tras un largo preámbulo y ya con un estadio lleno y ansioso por cantar los temas norteños, la banda sinaloense salió al escenario con su conocido Jefe de Jefes. Con el estilo tan característico de voces y ritmos inconfundibles en la escena musical, rápidamente provocaron la euforia de la grada que en su mayoría portaba sus texanas, botas y jeans.

Te podría interesar: Llega El Lago de los Cisnes a Querétaro

Oscar Lara, Hernán, Jorge, Luis y Eduardo Hernández, enfundados en sacos coloridos y manejando magistralmente sus instrumentos, iniciaban la conexión de la noche, la misma que nunca han perdido y que los ha llevado a visitar cientos de ciudades alrededor del mundo.

Las pantallas que secundaban a la banda, donde se proyectaban visuales geométricas alusivas a los temas, videoclips y fotografías de los 5 protagonistas, fueron el telón de canciones como Mi buena suerte, La reina del sur, La mesa del rincón, Quiero volar contigo, Ni pariente somos, Contrabando y traición y La Manzanita, que servían para iniciar con el pie derecho el concierto y mantener la vibra a los largo del mismo.

Incluso hubo un momento durante el espectáculo en el que Los Tigres del Norte hicieron un pequeño homenaje al ya fallecido Vicente Fernández. Rindieron homenaje con piezas como De qué manera te olvido, Por tu maldito amor y Hermoso cariño, entre otras.

Los Tigres del Norte vuelven a Querétaro

Posteriormente, los felinos interpretaron su ya conocido éxito La Puerta Negra, un himno musical del regional mexicano que traspasó fronteras y que es muy identificable para la agrupación. Para ese momento el éxtasis en las gradas ya era palpable y el recinto de las ‘gallas’ ya estaba convertido en una auténtica fiesta.

Luego sonaron los acordes de los violines que daban paso al tema Golpes en el corazón, el cual vivió su segundo aire desde que lo interpretaron con Paulina Rubio para el disco Unplugged.  

Los éxitos seguían y seguían, con un público que no se cansaba de escucharlos y al más puro estilo del ‘Charro de Huentitán’, la banda cantaba hasta que la audiencia se lo pidiera. 

Todavía existían sorpresas y canciones en el setlist, con la participación de bailarinas y un despliegue de luces que adornaban el escenario para ilustrar temas como América, canción con la que unen emociones y finalizan sus presentaciones.

Con información de Carlos Curiel