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Influenza o COVID-19, te decimos en qué son diferentes

Foto: Cuartoscuro
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Algunos síntomas son similares en la influenza o COVID-19; sin embargo, el coronavirus ataca de manera más veloz y más fuerte a los seres humanos. Además, aún no hay tratamiento para este Arcelia Guadarrama/Magdiel Torres A mediados de 2009, México se vio afectado por una pandemia que se le conoció como AH1N1. Hoy, casi 10 … Leer más

Algunos síntomas son similares en la influenza o COVID-19; sin embargo, el coronavirus ataca de manera más veloz y más fuerte a los seres humanos. Además, aún no hay tratamiento para este

Arcelia Guadarrama/Magdiel Torres

A mediados de 2009, México se vio afectado por una pandemia que se le conoció como AH1N1. Hoy, casi 10 años después, una pandemia de tintes similares azota el orbe, se trata de la enfermedad COVID-19 y, aunque los síntomas de ambas son similares, aquí les presentamos diferencias en su estructura y su sintomatología.

Para delimitar bien estas dos enfermedades, ocasionadas por virus completamente diferentes y con efectos distintos, especialistas explican lo que debes saber de ambas afecciones.

Sandra Hernández Puga, directora médica del Hospital San José Moscati, explicó que el coronavirus está conformado por cepas de virus agresivas y de acción veloz.

Tienen replicación muy rápida; es decir, actúan en horas”, dijo.

Hernández Puga agregó que las enfermedades generadas por la familia de virus denominados coronavirus presentan síntomas respiratorios agudos severos.

La sintomatología que se evidencia en pacientes infectados con el nuevo coronavirus es fiebre alta, tos, dolor de cabeza, malestar general, dolor muscular y articular. Algunos presentan diarrea y dificultad para respirar.

De esos, indicó Hernández Puga, los más graves llegan a presentar neumonía. La enfermedad inicia en mucosas y de ahí se replica en vía respiratoria.

Ahí empieza, digamos, la respuesta inmunológica tuya que, como no tienes anticuerpos, avanza la replicación y la falla respiratoria”, explicó la doctora.

La especialista agregó que los factores de riesgo en la enfermedad denominada COVID-19 son todas las personas que padecen enfermedades graves, como diabetes, hipertensión, cáncer y algún otro compromiso inmunológico.

Influenza o COVID-19
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Es por ello la importancia de mantener una cuarentena, sobretodo en la población de los sectores vulnerables.

(La cuarentena es importante) para que no transmitas. Como es más virulento, es más rápido en su transmisión ya sea por contacto o por secreciones y, aparte, como vive más que, por ejemplo la influencia, puede vivir siete horas en superficies inertes y el coronavirus vive 24 horas. Entonces, por eso es tan importante que los casos que tengamos confirmados se aíslen para evitar la propagación hacia más pacientes”, detalló.

El aislamiento que debe aplicar un paciente ya diagnosticado con COVID-19 debe durar como mínimo 14 días, con tratamiento que puede ser ambulatorio, es decir, en casa, pero aislado en su cuarto, sin convivir con nadie más y siempre utilizando el cubrebocas.

La doctora alertó sobre la información falsa que se difunde respecto a esta nueva enfermedad de la cual se dice, por ejemplo, que con las altas temperaturas será más complicado su contagio.

No, eso es falso, independientemente de la temperatura no influye en la replicación del virus”, señaló.

Comparado con la influenza, el COVID-19 es calificado por la especialista como una enfermedad agresiva.

El cuadro clínico del COVID es más agudo y los síntomas avanzan más rápido, por ejemplo que te falte el aire en influenza puede tardar de tres a cinco horas cuando es un caso grave y el COVID es menos de tres horas”, comentó.

De acuerdo con la especialista médica, esto se da por que son enfermedades con síntomas similares, pero generadas por familias de virus diferentes.

Influenza o COVID-19
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Si resulta complicado diferenciar los síntomas de la influenza del coronavirus, cuando apareció la primera a mediados de 2009 en México, también fue difícil determinar si el enfermo padecía influenza u otra enfermedad relacionada con la gripe debido a que la influenza es una especie de virus de gripe.

El AH1N1 es una mutación de un virus común en los cerdos, conocida como gripe porcina. La mutación del virus permitió que se produjera un contagio entre especie.

En la actualidad, los sistemas de rastreo y contención de las epidemias son más eficaces y una diferenciación entre la sintomatología puede coadyuvar a una temprana atención.

El doctor Juan Cuauhtémoc Díaz Zagoya, investigador del Departamento de Bioquímica de la Facultad de Medicina de la UNAM, señaló que las medidas que se han empleado para la contención del virus son las correctas.

Sin embargo, los contagios serán inevitables. El doctor señaló que la diferencia entre ambas enfermedades (influenza y COVID-19) es mínima, pero destacó que, en el caso de la influenza, hay abundante secreción nasal y, en cambio, en el coronavirus la tos es seca.

Es importante saber distinguir los síntomas de la influenza, pues también debemos cuidarnos de esta enfermedad.

Los síntomas más comunes de esta enfermedad son fiebre muy alta de 39 grados centígrados o más; dolor de cabeza intenso; dolor muscular, flujo nasal, dolor de garganta y tos. Algunos pacientes han reportado vómito y diarrea. Hay síntomas que indican la intervención médica hospitalaria urgente.

En los niños hay que tener especial cuidado. Debe observarse sobre todo si la respiración es rápida o si hay dificultad de respirar, si la piel cambia de color, pues adquiere un tono azuloso o grisáceo, si no se ingieren los suficientes líquidos, si hay vómitos severos y persistentes, si no quieren o pueden levantarse o interactuar o si están tan irritables que no se quieren dejar cargar. Los síntomas parecen mitigarse y repentinamente reaparecen con más fiebre y tos.

Hace ya casi un año que esta pandemia azotó particularmente a México y se han aprendido muchas cosas al respecto. En aquel entonces, los países del orbe reprocharon al Gobierno haber actuado con retraso; la OMS sugirió que, de haberse tomado cartas en el asunto con antelación, los resultados hubiesen sido menos desalentadores, pues hasta julio de 2010 se confirmaron 72 mil 548 casos y mil 316 muertes, según cifras de la Secretaría de Salud; en una evolución de la enfermedad que llegó a la fase 4, es decir, con la presencia de la influenza estacional que aún causa estragos en poblaciones vulnerables.

El COVID-19 ha dejado en la República Mexicana 2mil 439 casos confirmados y 125 personas fallecidas, pero es difícil determinar cuál será su evolución estadística, pues, por un lado, se trata de un virus más agresivo que el AH1N1 y, por otro lado, la OMS ha señalado que México, al contrario de lo ocurrido con el AH1N1, ha implementado a tiempo las medidas de seguridad.

Lavarse las manos, guardar distancia, toser o estornudar empleando la parte trasera del codo y no salir de casa excepto para lo absolutamente necesario son medidas que se implementaron hace 10 años y que los mexicanos no desconocen. Sin embargo, aún queda mucho por saber de este tipo de contingencia y los expertos recomiendan paciencia, cuidado y observación.

AGA

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