Gallos vuelve a caer en Torreón

Querétaro saltó al campo como víctima, no gana en el TSM desde 2014, por lo que la estadística pronosticaba un derrota de los ‘albiazules’

Francisco Pérez

El equipo de Alex Diego llegó a la cancha norteña con la necesidad de ganar, luego de caer la jornada pasada contra Atlas. El conjunto queretano no pudo sostener la seguidilla de victorias y tenía la obligación de sumar en el TSM.

Con la derrota, el equipo queretano se quedó con 7 puntos, y cae al lugar 13; con lo que abandona los puestos de Liguilla para este torneo Guard1anes 2020.

Querétaro saltó al campo como víctima, no gana en el TSM desde 2014, por lo que la estadística pronosticaba un derrota de los ‘albiazules’. El equipo local llegó a este partido con cinco puntos, producto de una victoria, dos empates y una derrota; Querétaro venía con mejor marca, pero con la complicación de un estadio que siempre pesa a los visitantes.

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Los primeros minutos fueron de dinámica, Gallos trató de ser fiel a su estilo de ir al frente, a pelotazos, pero siempre con la idea de dejar a sus delanteros de frente a portería.

La presión que exigían la defensa y la mediacancha fue benevolente con Josecarlos Van Rankin, que a los 14 minutos sacó un potente disparo desde tres cuartos de cancha. El impacto no pudo ser rechazado por el portero y capitán queretano, Gil Alcalá, quien se lanzó desde donde estaba y apenas rozó la pelota. Fue el uno por cero.

Gallos intentó ir al frente y frenar al complicado equipo laguenro. Tuvo frutos hasta el final del primer tiempo, cuando una jugada en el área del equipo local terminó en penal a favor de Gallos Blancos, mismo que fue convertido en gol por Hugo Silveira. En la segunda mitad, Querétaro trató de conseguir el gol que les diera la ventaja.

El partido era agradable, con ida y vuelta, ambo equipos mostraron ambición por ir al frente. Por parte de Santos , Garnica fue muy superior a Erick Vera, quien fue superado por su rival en repetidas ocasiones, una de ellas, la jugada del gol de la diferencia, en la que un centro por el costado derecho terminó en un remate de cabeza por parte de Raúl Octavio Guerrero.

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Gil Alcalá fue responsable en cierto grado, ya que el remate no fue colocado, sin embargo, el recorrido del arquero fue en dirección contraria y no alcanzó a meter las manos para detener el balón.

El partido continúo su curso, Gallos Blancos no pudo ponerse de frente al arco del portero Acevedo y perdió el partido. Los dos últimos enfrentamientos han sido complicados para Querétaro; el rival no ha mostrado gran diferencia y, desafortunadamente para la causa albiazul, se han puesto arriba con goles circunstanciales.

El equipo de Alex Diego se queda sin gas y la calidad individual pasa factura ante equipos que muestran más fondo en su plantel.