Trump, de 78 años, ha tenido dificultades para adaptarse a Harris, de 59, que es la primera mujer y la primera persona de ascendencia negra y surasiática en ocupar la vicepresidencia. El expresidente republicano ha recurrido en ocasiones a invocar estereotipos raciales y de género, frustrando a los aliados que desean que Trump se centre en las diferencias políticas con Harris.