Seth Pérez
Este domingo 17 de septiembre la feria de la Humanidad celebrada desde 1930, a 35 kilómetros de París, cerrará anticipadamente a causa de una alerta de tormenta. Este anuncio poco usual debe implicarnos en visualizar una versión actualizada de sus consecuencias. Las tormentas traen efectos tanto para nuestra vida cotidiana pero también nuestra forma de vivirlos implica consecuencias para el clima. ¿Cómo cuales?
En estos festivales una tormenta implica que de no resguardar los desechos solidos pueden terminar en alcantarillas y quizás en los mares. El cuidado que tenemos de cada acto implica una consecuencia por los procesos que siguen en consecuencia. Por ejemplo, hemos visto lluvias torrenciales en diversas ciudades del país y vemos como mercados públicos son arrasados, vehículos que terminan inundados y empatizamos con los afectados. El medio ambiente también sufre al recibir todos estos desechos.
Toneladas de plásticos, estructuras metálicas y muchos otros objetos, terminan contaminando campos, ríos y hasta el mar. Para los habitantes de la ciudad todo termina cuando limpian nuestras calles, pero para los pobladores de las afueras, de las zonas cercanas a ríos o de playas, viven las afectaciones por la acumulación de estas toneladas de basura en su totalidad o en forma de pedacería. ¿Usted ha encontrado lo que parece piedras preciosas en la playa que son restos de botellas?