#Sapiens: ¿Por qué se arrugan los dedos cuando estamos en el agua?
Sí, todos hemos tomado un baño largo, lavado los trastes, o pasado un buen rato en la piscina. Luego de un rato los dedos nos quedan “como de viejito” ¿Por qué sucede esto? La creencia popular de que esto suceda es que el agua se adentra en la piel y la ablanda de modo que … Leer más
Sí, todos hemos tomado un baño largo, lavado los trastes, o pasado un buen rato en la piscina. Luego de un rato los dedos nos quedan “como de viejito” ¿Por qué sucede esto?
La creencia popular de que esto suceda es que el agua se adentra en la piel y la ablanda de modo que hace que se formen arrugas en ella, esto nos pasa -recurrentemente- en dedos de manos y pies. Sin embargo, de acuerdo con la Universidad de Newcastle, esto es totalmente falso.
La piel ‘de viejito’ luego de estar en el agua, se forma porque nuestro cuerpo es capaz de adaptarse a la situación y nuestras células definen que es mucho más sencillo sostener objetos con los dedos arrugados que con la textura habitual de nuestra piel.
De acuerdo con un artículo publicado en la revista Royal Society Biology Letters, al estar un tiempo prolongado en el agua, los glóbulos de sangre que se sitúan bajo la piel, se encogen en respuesta a un impulso que proviene directamente del sistema nervioso. Esto deriva en que las yemas de nuestros dedos se contraigan (Así es, no se hinchan…) lo que provoca las arrugas.
Esto responde directamente a un proceso evolutivo, pues los dedos arrugados permitirían a nuestros ancestros poder buscar comida en el agua, o -en el caso de los pies- sostenerse de las superficies húmedas.