Cestas de mimbre, una propuesta natural para decorar

Si retrocedemos aún más en el tiempo, nos daremos cuenta de que el mimbre presenta tonalidades como beige, marrón y arena

Excell Erre/ Ópera Rhagàntia

En el pasado, la cesta realizaba diversas funciones, desde fungir como cuna hasta soporte de madera, posteriormente, solo utilizadas para recoger la ropa sucia y desplazados al baño de servicio, con el tiempo, además de los numerosos usos prácticos, han adquirido un gran valor decorativo y actualmente han tomado su lugar en todas las estancias de la casa…

Hablo de las  “cestas de mimbre”.

En realidad, si retrocedemos aún más en el tiempo, nos daremos cuenta de que el mimbre presenta tonalidades como beige, marrón, arena, incluso se pueden aplicar otros tintes que permiten conseguir diseños y aspectos totalmente renovados.

Románticas, rústicas, y con un sabor antiguo, tal vez forradas con una tela de cuadros o un bordado inglés, pero también modernas, minimalistas y coloridas, nos aportan un toque de naturaleza en nuestros interiores.

Por ejemplo: Baúles de mimbre a los pies de la cama es una forma de amueblar sin desorden.

Floreros: Dando color al ambiente.

De hecho, la elección correcta de los colores de flores para combinar, aumenta el diseño, debido al contraste real entre las flores en tonos brillantes y la neutralidad de este material.

Conviértelos en contenedores, funcionales pero fascinantes: para la ropa en el baño, para guardar almohadas y mantas en la sala de estar o el dormitorio: Revistas, sombrillas, juguetes o leña para la chimenea.

Grandes, pequeñas, rectangulares. ¿Cuál es tu favorita?

MT