El día de mañana, se conmemora a las niñas y a los niños en nuestro México, un día sumamente especial para los más consentidos de las familias, pero también un día para reflexionar sobre la importancia de la niñez en la sociedad, sobre la atención que les demos, pero sobre todo para estar al pendiente de ellos en todos los aspectos y encausarlos a un crecimiento sano y sin necesidades.
Todos fuimos niños y todos recordamos los festejos de este día, creo que sobre todo en las escuelas y en las casas sanjuanenses, siempre de alguna o de otra forma se celebra este día en donde la comida, los juegos, los regalos, hacen de este momento, un elemento sumamente festivo para nuestros niños.
Creo la niñez, sin duda, es una de las etapas más hermosas de nuestras vidas, en mi caso, todavía me toco estar jugando en las calles de nuestro querido centro histórico, nos tocó, poder acudir a las escuelas y salir junto con nuestros compañeros a las calles de San Juan del Río, calles completamente tranquilas. Era una ciudad completamente diferente a la que conocemos actualmente.
Por cierto, en nuestra ciudad, por mucho tiempo, la actual calle de Hidalgo, se llamo calle de “Los Infantes”, por la existencia de una escuela que estaba a la mitad de la calle, y como acudían ahí niños que se les decían “infantes”, por eso se le nombro a la calle con ese terminó, sin embargo, la calle hacía referencia a la niñez de la ciudad y era un buen motivo para tenerlos siempre presentes.
Hoy, la situación es diferente en San Juan del Río, nuestros niños están creciendo con muchos cuidados, ya no es factible verlos solos en nuestras calles, o llegar a las escuelas de esa forma, ya todo es diferente.
Sin embargo, la niñez sanjuanense, crece con esperanzas, con alegrías, con mucho ánimo; la sonrisa de los niños es capaz de cambiar nuestra situación personal, es capaz de hacer que hagamos todo lo que ellos nos pidan, es el motor de las familias. Su inocencia y su cariño nos ayudan a entender, la importancia de la vida y la importancia de tener una sociedad que dé respuesta a sus necesidades, para poder heredarles un mundo mejor, que, a su vez, ellos heredaran a las futuras generaciones.
Tenemos mucho que hacer por las niñas y por los niños sanjuanenses, ellos son también ejemplos para nosotros, pero también tenemos que ser ejemplos permanentes para cada niña y cada niño.
Desde esta colaboración, deseo que todas las niñas y todos los niños sanjuanenses tengan un excelente día y que sean felices por siempre para que sea felicidad guie a la sociedad hacia un buen destino y a la felicidad que desean todos los seres humanos.
MT