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Diez formas en que se manifiesta la violencia obstétrica

La violencia obstétrica no sólo se limita a gritos o malos tratos. Incluye prácticas como la episiotomía (corte o incisión) innecesaria, la cesárea sin consentimiento, e incluso la negligencia médica.
La violencia obstétrica no sólo se limita a gritos o malos tratos. Incluye prácticas como la episiotomía (corte o incisión) innecesaria, la cesárea sin consentimiento, e incluso la negligencia médica.

La violencia obstétrica deja graves secuelas, tanto físicas como emocionales; puede provocar depresión, ansiedad y estrés postraumático

La violencia obstétrica persiste como una sombría realidad en nuestro país.

Según datos alarmantes, más del 40% de las mujeres en México han experimentado algún tipo de maltrato durante el parto.

La violencia obstétrica no sólo se limita a gritos o malos tratos. Incluye prácticas como la episiotomía (corte o incisión) innecesaria, la cesárea sin consentimiento, e incluso la negligencia médica.

00Esta violencia deja graves secuelas en las mujeres, tanto físicas como emocionales. Puede provocar depresión, ansiedad, trastorno de estrés postraumático, e incluso afectar el vínculo con su bebé.

Esta cruel práctica deja cicatrices emocionales y físicas duraderas en las mujeres y sus familias.

La violencia obstétrica es normalizada y naturalizada; es difícil de aceptar por el personal de salud y evidencia la crisis actual en la formación y en el ejercicio profesional de la medicina y la enfermería.

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Pero, además, desestabiliza la representación social idealista del médico humanista, empático, con vocación de servicio, que cura y ‘hace el Bien’; y el personal se siente interpelado, juzgado y amenazado, sin entender.

La prevención comienza con la concientización. Es fundamental que todas las mujeres conozcan sus derechos durante el embarazo y el parto.

La capacitación adecuada del personal médico y la implementación de protocolos de atención humanizada son cruciales para erradicar esta violencia.

Prevalencia la violencia obstétrica en  Querétaro

La prevalencia de violencia obstétrica en Querétaro va al alza; el 38.4 de las mujeres de 15 a 49 años cuyo último parto/cesárea ocurrió en los últimos 5 años habían sido víctima de este tipo de maltrato.

La entidad se coloca como la cuarta con más índice de violencia obstétrica -San Luis Potosí con 38.9, Ciudad de México y Tlaxcala empatadas con 38.5- según los últimos datos oficiales.

Diez principales situaciones de maltrato durante el parto o cesárea:

  • Le gritaron o regañaron
  • La presionaron para que aceptara que le pusieran dispositivo o la operaran para no tener hijos
  • La ignoraban cuando preguntaba por su parto o bebé
  • No dio permiso o autorización para que le hicieran cesárea
  • No le informaron de manera que pudiera. comprende por qué era necesario hacerle cesárea
  • Se tardaron mucho tiempo en atenderla porque le dijeron que gritaba o se quejaba mucho
  • La obligaron a permanecer en una situación incómoda o molesta
  • Le dijeron cosas ofensivas, humillantes o denigrantes
  • Le colocaron algún médico anticonceptivo o la operaron o esterilizaron para no tener hijos
  • Se negaron a anestesiarla o a aplicarle un bloqueo para disminuir el dolor, sin explicaciones

¿Cómo se puede prevenir?

  • Capacitación: El personal médico debe recibir formación en derechos humanos y atención humanizada del parto.
  • Información: Las mujeres deben conocer sus derechos y opciones durante el embarazo y el parto.
  • Denuncia: Es fundamental denunciar cualquier tipo de violencia obstétrica ante las autoridades correspondientes.

Conductas que se interrelacionan y que constituyen violencia obstétrica:

  • Sobremedicalización innecesaria y patologización sistemática de un evento reproductivo fisiológico.
  • Pérdida de autonomía, protagonismo y capacidad de decisión de parte de la mujer en el parto institucionalizado/hospitalario (sistemático).
  • Trato deshumanizado: Maltrato y abusos verbales, psicológicos y físicos hacia la mujer.
  • Negación de la atención a la que la mujer tiene derecho.
  • Carencias estructurales del sistema institucional de salud que no permiten que el personal haga debidamente su trabajo en la atención obstétrica

FUENTES:

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