Ya no es posible pagar 5 millones de dólares por un jugador que de origen vale 750 mil dólares o te lo prestan por menos de la mitad y aún así sirve
Iván Torres
Se cumplen dos años de colaborar en este espacio, situación que agradezco infinitamente a quienes han impulsado la permanencia del mismo. Miguel Ángel Flores, Paulo Casal y por supuesto el consejo editorial, responsablemente seguiremos tratando de generar ideas que ayuden a entender lo que pasa en el fascinante mundo del deporte. La ocasión y lo que más nos preguntan es -¿qué pasará con nuestros Gallos? Yo empezaría con aquella frase, últimamente trillada, pero no por demás cierta: “Quién no conozca su historia, estará condenado a repetirla”. Quiero pensar que los ahora dueños o encargados de la franquicia queretana, saben lo que ha sucedido en 70 años de historia (mismos que se cumplen el 8 de julio) y entenderán qué hacer en esta plaza. Y antes de decir más, quiero reconocerles el valor que tiene invertir y arriesgar su capital en Querétaro, y provocar la derrama económica que eso implica. Hemos escuchado a todos los que ya no están, de alguna manera, cada quien y con sus recursos han puesto su granito de arena. Seguramente esta nueva directiva lo hará. Primer error sería, pensar que el aficionado que paga un boleto no sabe, aquí en Querétaro, el “respetable” es muy enterado de muchos temas y además sabe de futbol, opina, muchas veces lo hace con conocimiento, con argumentos.
Otro error sería no contar con gente de futbol en la directiva, siempre nos ha ido mejor cuando en la columna vertebral de la organización hay quien ve y ordena las situaciones de pantalón corto y largo, equilibra. La etapa de mayor crecimiento de esta franquicia sse dio cuando se involucraron gente como Adolfo Ríos, Claudio Suárez, Markus López, Jaime Ordiales. Se analizaban a fondo las contrataciones, es decir, en el futbol no todo es compra de jugadores, existen los préstamos, el mercado es amplio, hoy en día es muy fácil saber cuánto cuesta un jugador desde su origen, sin intermediarios. Eso da paso a no cometer otro error que es no tener una buena administración. Ya no es posible pagar 5 millones de dólares por un jugador que de origen vale 750 mil dólares o te lo prestan por menos de la mitad y aún así sirve. Siempre el valor de un jugador debe ser proporcional a su calidad. Cuando no fue así, al menos en Querétaro, pasamos penurias. Buena administración, ojo para tener jugadores de calidad, gente que conoce del negocio de trinchera del futbol y respeto al aficionado, puede ser un buen comienzo.