Debemos recordar que los contrapesos son importantes en toda democracia; así como, importante es el papel que juegan los órganos del Estado Mexicano, como el Congreso de la Unión y específicamente la Cámara de Diputados
Hugo Cabrera
En México se percibe y vive una ausencia total de equilibrio político. Urge mayor contraste de posturas e ideas en los espacios de representación, para evitar que el país siga en retroceso, caminando a la voz de una sola persona.
Debemos recordar que los contrapesos son importantes en toda democracia; así como, importante es el papel que juegan los órganos del Estado Mexicano, como el Congreso de la Unión y específicamente la Cámara de Diputados.
Sin duda, la próxima legislatura jugará un papel histórico, no sólo por las mujeres y hombres que a través de la decisión ciudadana la integrarán, sino porque desde este órgano se rediseñará el rumbo del país, a través de las políticas públicas y el marco normativo.
Recordemos que en poco más de dos años se ha presentado un recorte de recursos y desaparición de programas esenciales para el desarrollo de las mujeres, el campo, la salud, los migrantes, entre otros que podría seguir enlistando. Desde San Lázaro se han tomado muchas decisiones al gusto de una voz y no acorde a las necesidades reales de las y los mexicanos.
Es por ello que acudí ante la Comisión de Procesos Internos de mi Partido para presentar mi carta intención y prerregistro como precandidato a Diputado Federal por el Distrito II que lo integran los municipios de San Juan del Río, Tequisquiapan y Ezequiel Montes. Municipios que no me son ajenos, los he caminado, trabajado y por ende conozco sus retos y fortalezas.
Respetuoso a los procesos daré continuidad a los pasos que marca la convocatoria de mi Partido, sin dejar a un lado mi deseo, emoción e intención de dar continuidad a los 30 años de trabajo que he realizado siempre a favor de Querétaro y de México con honestidad, compromiso y resultados.
Recordando también que nada está escrito, no se pueden cantar victorias anticipadas, ni actuar con mezquindad, ya que la voluntad y confianza se gana día a día, con trabajo, resultados y congruencia.
Hoy más que nunca, vivimos un contexto histórico donde los contrapesos serán cruciales para abonar al desarrollo del país e impulsar la nación moderna y que afronta los retos con valentía, que tanto anhelamos.