Gonzalo Flores/Infrasónico
Asistir a conciertos es cada vez más costoso. Antes de la pandemia, las empresas dedicadas a la venta de boletos ya aplicaban diversas divisiones en los foros con el fin de obtener mayores dividendos con distintos precios, principalmente en lugares con espacios numerados.
Sin embargo, tras el regreso de los espectáculos posterior a la emergencia sanitaria, esas divisiones incrementaron, y ya son muy pocos los eventos que ofrecen accesos generales. Eso sí, la mayoría con cargos extra por el “favor” de las empresas boleteras para que nos vendan una entrada.
Así, el fan que quiera estar más cerca de su artista, tendrá que pagar más. Lo vemos con secciones denominadas VIP, platino, oro, plata, zonas divididas por colores o niveles, mientras que los festivales incrementan precios desde venta anticipada pasando por varias fases hasta el día del evento.
La máxima es divide y ganas más.
Es raro encontrar a músicos que defiendan al público y se opongan a esta situación. Robert Smith, líder de la legendaria banda The Cure, lo hizo.
Tras anunciar una gira en Estados Unidos después de siete años de no presentarse en suelo norteamericano, el músico inglés manifestó su enojo por lo elevado de los costos contra Ticketmaster.
A través de sus redes sociales, expuso estar “asqueado” por los elevados costos de Ticketmaster y explicó que “para ser muy claros: el artista no tiene forma de limitarlas”.
Con ello comenzó una negociación con la empresa y posteriormente informó que consiguió un acuerdo con Ticketmaster -que aceptó que cobra tarifas excesivamente altas-, para devolver una parte del pago a los seguidores de la banda en todas las ciudades que se presentarán.
Algo que significa un pequeño triunfo frente al abuso comercial de Ticketmaster.
En la agenda semanal, este domingo se presenta en Querétaro la banda bielorrusa Molchat Doma, considerada la banda de post punk más importante de la actualidad. El Teatro Metropolitano será el escenario donde cerrarán su gira por México. El año pasado, lograron dos fechas con sold out, así que generan una gran respuesta del público local.
Los boletos tienen un costo de 900 pesos en zona amarilla; 750 pesos en zona blanca; 850 pesos en zona morada y 650 pesos en zona naranja, todos más cargos de boletera.
Para Cuidad de México y Querétaro, se contará como acto de apertura con Riki, proyecto de Naiff Nawor, originaria de Los Ángeles, California, que en su momento fue parte de la banda Crimson Scarlet. Con un estilo inmerso en el synth-pop será el preámbulo perfecto para redondear una noche oscura en la ciudad.