Fernando Islas
Cuando Andrés Manuel López Obrador buscó la presidencia de la República en 2006, la campaña que emprendió la derecha política y empresarial fue dirigida a generar incertidumbre en la ciudadanía respecto al supuesto riesgo que la economía nacional iba correr si un candidato progresista llegaba a la titularidad del Poder Ejecutivo, misma historia en 2012 y en 2018, en esta última campaña en pleno “boom” de las redes sociales, algunos “influenciers” y pseudo-periodistas vaticinaban una catástrofe financiera, la cual jamás sucedió.
Curiosamente los promotores de este tipo de información son los mismos que devaluaron de manera obscena nuestra moneda, con una política de gobierno irresponsable y con la única vocación de enriquecerse a costa de la ciudadanía y acrecentar su fortuna a través de vinculaciones con la iniciativa privada y extranjera. De forma contraria, el gobierno de la 4T ha logrado la apreciación del peso en un 13.7%, fortaleciendo nuestro peso en relación al dólar, algo que con el antiguo régimen jamás hubiera sucedido.
Todo esto gracias a una política económica monetaria responsable, con espíritu austero y con una vocación de servicio a los que menos tienen, eso es el trabajo de la cuarta transformación.