Los resultados electorales en Querétaro siguen provocando una clara lucha de poder, donde los dos partidos políticos de mayor representación siguen peleando el control del estado. Mientras unos insisten en que obtuvieron la mayor cantidad de votos y que gobiernan los municipios más importantes, otros aseguran que los distritos y alcaldías ganadas son muestra de una victoria electoral. Ahora, la pugna se ubica en ver quién controla el Congreso del estado, donde no solamente está en juego el poder político, sino también las decisiones que permitirán o no la trascendencia del estado.