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“La justicia como equidad” que conlleva el considerar la viabilidad de la sociedad moderna con un supuesto básico: la cooperación de todos sus miembros: Sergio Ibarra

8 de mayo 2017

“La justicia como equidad” que conlleva el considerar la viabilidad de la sociedad moderna con un supuesto básico: la cooperación de todos sus miembros: Sergio Ibarra

Sergio Ibarra

La idea de que exista una sociedad como un sistema equitativo de cooperación, enunciado por el pensador norteamericano John Rawls, es la base para el gran enunciado que hizo en su momento “la justicia como equidad” que conlleva el considerar la viabilidad de la sociedad moderna con un supuesto básico: la cooperación de todos sus miembros.

Los hechos sucedidos en Reynosa la semana pasada, ante los enfrentamientos de dos células del cártel del golfo, ocasionó la pérdida de la vida de cinco de sus miembros y el registro de once bloqueos en aquella ciudad, lo anterior como consecuencia de la caída de uno sus líderes, el “comandante el toro” el pasado 22 de abril. Por momentos se tuvo que declarar alerta roja y de manera permanente reconvenir a los ciudadanos, a no salir de sus casas.

Las condiciones de Seguridad son básicas para que cualquier sociedad humana pueda existir, sin importar sus etnias o modelos políticos o los tiempos. La Seguridad es intangible no se le puede tocar, pero sabemos cuando no existe. Ante el surgimiento del urbanismo, los espacios comunes donde las personas conviven y hacen sus vidas, se multiplicaron exponencialmente en relación a los que existían en las sociedades feudales o rurales, que le antecedieron.

Los espacios públicos se convirtieron, en cosa de dos siglos, en los motivos de preocupación de todo gobierno. Entiéndase por espacios públicos las calles, pero también los edificios de gobierno, las instalaciones eléctricas, los ductos de combustibles, el drenaje, las autopistas, los parques y jardines, el alumbrado público, las escuelas, las universidades y hasta los hospitales, pero también los espacios que siendo privados son motivo de convivencia social como las salas de cines o de teatro, los centros comerciales o los estadios donde se practican deportes, hasta inclusive un restaurante o un bar o un antro. De tal forma, que estos espacios públicos son ahora el principal motivo de riesgos y de vulnerabilidades.

La modernidad trajo el urbanismo, el crecimiento y la adopción de un modelo de vida que está en función de la tecnología, pero trajo también un fenómeno del que nada ni nadie se puede sustraer: la globalización. Que si bien ha traído bienestar y más empleos a economías emergentes, el Estado de Querétaro es un ejemplo de ello, es también cierto que trajo delitos globales como el tráfico ilegal no solo de mercancías, sino de drogas, de armas, de personas, de dinero y de propiedad intelectual.

Fenómeno paralelo al invento que empieza a causar una transformación, tan profunda, como la que causó la imprenta: el internet. Es preciso reconocer que vivimos en el nacimiento de una nueva sociedad, así como existió la sociedad agrícola, luego la industrial, hoy somos testigos del nacimiento de una sociedad interconectada.

La Seguridad, entendida entonces como ese conjunto de efectos que permiten la convivencia social pacífica, ha sido afectada por todos estos fenómenos. México ni Querétaro son la excepción. Estamos inmersos en un conjunto de influencias que no dependen de quien gobierna. ¿A caso es la culpa de los Presidentes o de los Gobernadores o de los Alcaldes que se consuma droga en el país vecino en las cantidades que se consume? ¿el que exista el tráfico de armas y de dinero? ¿O que las restricciones derivadas del ataque de las torres gemelas hubiese propiciado el bloqueo parcial del flujo de la droga y con ello el incremento del consumo en nuestra nación? ¿O la persecución y abuso a los derechos elementales de conciudadanos en USA ordenada por su nuevo presidente? No. Son realidades que superan a políticos, a empresarios y a intelectuales.

Los conflictos internos que enfrenta nuestra Patria nos han despojado de nuestros civilizados aderezos y ha puesto de manifiesto nuestra desnudez como sociedad. Las realidades que nos recuerdan la situación que vive nuestra Patria, como los hechos recientes en Reynosa o los 43 ausentes de Ayotzinapa o los delitos que se han vuelto comunes como los cristalazos o los secuestros exprés o tarjetazos, son eso realidades duras, inéditas y por momentos, traumáticas, pero son realidades. El pecado sería ignorarlas.

¿Se trata solamente de una guerra entre grupos de narcotraficantes? No. La realidad nos dice que se ha afectado un activo social esencial: la moral, ignorarlo sería un acto torpe. La moral no queda circunscrita en los involucrados directamente en el combate a la delincuencia organizada, incluye tanto a los buenos como a los malos o los perseguidos y a quienes los persiguen, pero también al resto de la sociedad. No es correcto omitir el riesgo en que la Patria se encuentra: un deterioro continuo de la moral social. Dejar de distinguir entre lo que se vale y lo que no se vale, de lo que es correcto y lo que es incorrecto, de lo que es el respeto a la vida del prójimo, a su familia, a sus bienes, a su negocio o a su trabajo.

La interconexión debiese ser una poderosa herramienta, pero no para que se sume al deterioro moral y acabarnos de desordenar y de desunirnos, sino para construir mejores y mas dignas realidades. El uso mal intencionado y perverso de las redes y la web, ya no solo para mentir, sino para provocar el deterioro del prestigio y de la calidad moral de una persona, de una familia, de una organización o de una institución o de sus productos o sus marcas o de sus líderes, se nos ha vuelto ya común.

El mantener la moral social depende de nosotros, de nosotros los civiles, los que tenemos una familia y un proyecto de vida legítimo por el cual vivimos y luchamos día con día. Son las conductas que asumamos y sumemos las que habrán de sostener o no la moral social. Bien decía el pensador al que refiero, sin cooperación, no podemos aspirar a una sociedad equitativa y justa, por mas leyes y mecanismos que se pongan.

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