La cacería de talentos está dejando de ser una tarea solamente de personas, algoritmos ayudan a gobiernos y empresas para contratar empleados. Pero, ¿serán mejores las computadoras que los humanos para elegir buenos trabajadores? ¿podemos encontrar con inteligencia artificial a mejores gobernantes o funcionarios públicos?
Un objetivo de las áreas de recursos humanos en empresas públicas o privadas es encontrar candidatos que cumplan los requisitos para ocupar los puestos libres. El éxito depende de encontrar al candidato adecuado reduciendo el tiempo de puestos vacíos. Cuando el número de solicitudes de trabajo crece, el objetivo se complica. Con inteligencia artificial se facilita encontrar entre miles o millones de solicitudes personas quienes cumplan o sean más afines a lo solicitado.
No obstante la ayuda de tecnología el reclutar es solo una parte. El estudio sobre tendencias globales en recursos humanos “Deloitte Global Human Capital Trends” alerta sobre los retos en la era digital y señala que se requiere una nueva estructura organizacional o una organización rediseñada para hacer frente a nuevas demandas digitales.
Los retos son ¿cómo rediseñar la organización y liderazgo del futuro? ¿cómo construir un sistema de administración que comprometa y empodere a los equipos de trabajo? ¿cómo construir una cultura de aprendizaje continuo, adaptabilidad, crecimiento y desarrollo personal? y por último ¿cómo usar la tecnología, los datos y la inteligencia artificial para lograrlo?
Es posible que algoritmos nos ayuden a determinar a las mejores personas a ocupar puestos públicos, pero la estructura gubernamental puede ser un freno. A pesar de la voluntad de servidores públicos honestos los resultados saltan a la luz. La estructura de gobierno está alejada de la gente y sus problemas.
El rediseño debería promover la proximidad con el ciudadano, la transparencia, el dialogo, el aprendizaje continuo para solventar problemas y evitar la corrupción. ¿Usted que opina?