Pedro L. Jáuregui

La COVID-19 no parece irse y faltan cinco meses para las elecciones en los Estados Unidos, el presidente Donald Trump, parece tener pocas probabilidades de retener el cargo, pero algo similar se dijo cuatro años atrás cuando tenía pocas probabilidades de derrotar a Hillary Clinton y el resultado le favoreció.

El actual presidente, rey de las cortinas de humo, que es el arte de desviar la atención de los desatinos de su gobierno, busca ahora salvar su mandato, de cualquier forma. En anteriores oportunidades ha ‘creado’ guerras, para fortalecer los ingresos de la industria militar o polémicas con otros mandatarios, como son las continuas amenazas contra el dictador Nicolás Maduro y sus ministros, que lo ha convertido en un bufón, similar al gobernante del país sudamericano. 

En el comienzo de su gobierno, en 1997, se fue lanza en ristre contra el plan de seguridad social de su antecesor Barack Obama, hasta el punto que acabó con los subsidios a los seguros de salud para personas de bajos ingresos, fundamentales para el funcionamiento de Obamacare.

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Cabe recordar que el mandatario usó su reputación para vender la idea que la COVID-19, no era letal sino un ‘cuento’ chino cuyas repercusiones fueron las más notorias.

Los expertos consideran qué si no hubiera dado este paso de acabar con los subsidios a los seguros de salud, el mismo habría sido un buen colchón para enfrentar la COVID-19.

Además la prepotencia y las salidas cantinflescas como la del lunes cuando con Biblia en mano y tono militar, momentos antes ir a un templo amenazó con desplegar a los militares para sofocar las mayores protestas que vive el país desde la década de 1960, por el asesinato de George Floyd a manos de un agente de policía del Minneapolis tras detenerlo por supuestamente pretender pagar con un billete falso.

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No olvidemos que en días pasados amenazó con cerrar las redes sociales, similar a lo que hacen los gobiernos de izquierda, a los que él ataca y veta o bloquea porque es él, además también señaló con abandonar la OMS.

GCS