Como he mencionado en artículos pasados, cualquiera de nosotros puede ser víctima del delito
Sergio Arellano
Si estábamos innovando con la oralidad en el poder judicial para el deshago de los asuntos. Se pondrá mejor con este tema que dará mucho de que hablar. Como he mencionado en artículos pasados, cualquiera de nosotros puede ser víctima del delito. Esto es algo común y rutinario. Sin ser omisos a lo que acontece, la gran pregunta es: ¿tenemos los canales adecuados para acceder a la justicia? Con la reforma constitucional del año 2008, se reformó el artículo 21 en donde pudo establecerse la acción penal privada.
Imaginemos un robo, la costumbre nos diría que denunciar ante el ministerio público es lo correcto, ¿cierto? Para ello, la autoridad investigadora reuniría los hechos constitutivos del delito para posteriormente presentarlos ante un juez. Sin embargo, ¿podemos ahorrar estos pasos? En otras palabras, si yo tengo todos los elementos de prueba, ¿tengo que seguir esta ruta? Para resolver esta duda, me gustaría mostrarles la redacción vigente de nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos: “El ejercicio de la acción penal ante los tribunales corresponde al Ministerio Público. La ley determinará los casos en que los particulares podrán ejercer la acción penal ante la autoridad judicial”.
¿Esto que quiere decir? Que podemos salvaguardar nuestros derechos de manera directa. Eso sí, las y los diputados de los congresos estatales deben adecuar el marco normativo correspondiente para que sepamos los supuestos en los que aplica. Un ejemplo de algunas causas previstas por el Código Penal de la Ciudad de México son las lesiones, acoso sexual y el allanamiento de morada. ¿Cómo vamos legisladores y legisladoras de Querétaro? Es innegable que la carga de trabajo, deficiencias y fallas humanas en el ministerio público, son una realidad.
Por ello resulta atractivo que la ciudadanía pueda hacer valer lo que conforme a derecho corresponda sin intermediarios. Sin dejar de mencionar que una adecuada argumentación y por supuesto, representación, harán la diferencia en este tipo de estrategias.