Javier Esquivel
Dio inicio la LXV Legislatura del Congreso de la Unión y con ella también las nuevas legislaturas en varios congresos locales del país. En cada una de las cámaras federales y locales, la oposición tiene la oportunidad de construir nuevos caminos para hacer un fuerte contrapeso que no tiene en los gobiernos estatales.
Es en el ámbito legislativo donde la oposición tiene mayor probabilidad de hacer valer la voz de las minorías que representan, de hacer valer su derecho a oponerse y generar una propuesta electoral para 2024 que en otros espacios.
Es desde las cámaras legislativas donde tendrán una mayor oportunidad de ser atractivos mediáticamente y generar oportunidades de nivelar los flujos informativos que domina el partido en el Gobierno en redes sociales, espacios publicitarios, círculos académicos e intelectuales y a ras de tierra.
Para mantener esa visibilidad y la atención de su base electoral y de electores ciudadanos que están indecisos o desencantados, necesitarán una fuerte y atractiva narrativa en el eje social y económico que compita con el relato de combate a la corrupción y del Estado benefactor.
En lo individual, cada legislador y legisladora de la oposición requerirá renovar las causas e ideas por las cuales luchará y defenderá en los tres años, pero sobre todo comunicar sus metas por alcanzar.
Sin claridad en este rubro esencial de posicionamiento, cada legislador no tendrá la fuerza necesaria para defender su distrito ganado y más cuando el gobernador o gobernadora sea de otro partido fuera de la alianza.
Existe la posibilidad que Morena gané las gubernaturas que están en juego el próximo año, por lo que cobra especial importancia este aspecto de la comunicación legislativa.
Capitalizar y aprovechar los canales de comunicación disponibles será prioritario. Cada una de ellas y ellos deberá estar capacitado y reforzar sus habilidades de entablar relaciones provechosas con los medios de comunicación de la Ciudad de México y de sus propios estados.
El estar capacitado de un fuerte discurso y propuesta política, más allá de sus habilidades de oratoria y debates, les abrirá una puerta para llevar a cada rincón un mensaje diferente al que hasta ahora han escuchado de sus antecesores.
La preparación y el trabajo en bloque es la clave, pero su peor enemigo y obstáculo será la ocurrencia, el abandono del protocolo de la investidura legislativa, la improvisación, la banalidad y la estridencia al subir a la tribuna, al gritar desde la curul o del escaño.
El destino de los partidos políticos de oposición no es aleatorio o de suerte, sino será reflejo de sus estrategias de comunicación.
En su capacidad de construir mensaje, de edificar y aprovechar canales de comunicación y de comunicar su propuesta alternativa de nación para 2024 dependerá su futuro próximo.