Seth Pérez
La mayoría de los proyectos que fracasan son por una mala gestión. Durante muchas décadas y miles de proyectos, el Project Managment Institute, edita un libro que integra las lecciones aprendidas, que de seguirlas, disminuye la probabilidad de fracaso. Para lograr los beneficios de estas lecciones contenidas en el libro llamado PMBOK, es necesario adicionar dos ingredientes adicionales.
En primer lugar, una cultura de registro del trabajo y rendición de cuentas, que implica que toda tarea y actividad para un proyecto debe planearse, definir fecha de conclusión, responsable, un entregable y reporte final. De concluirla en tiempo y forma, es indispensable documentar que sucedió y las posibles causas a fin de evitar que en otra ocasión se repita la misma situación. El segundo ingrediente es la transparencia y un ambiente positivo de colaboración que permita avanzar.
Una costumbre o cultura empresarial que impedirá el éxito de los proyectos es la de justificar a manera de pretexto o culpar, a fin de evitar un castigo, en lugar de asumir la responsabilidad para enfrentar un problema que se quiere evitar y no repetir. El fracaso requiere más habilidades llamadas soft skills o habilidades blandas, que conocimientos técnicos. ¿En su organización con qué metodología administran los proyectos?