Kike Mireles
Los morenistas creen que el pedir prestado es sinónimo de endeudar. Y cómo no, si así gobiernan.
Si no, pregúntenle a la gente de Tabasco. Que aún con deuda, el gobernador en ese entonces, Adán Augusto, solicitó año con año deuda y además sin transparentarla y sin pasarla por el Congreso, urgía remodelar el estadio del equipo de béisbol del hermano, del presidente. Mientras Tabasco tiene una deuda de casi 6 mil millones de pesos que seguramente no podrán pagar al término de este sexenio, en Querétaro tenemos deuda cero, lo que da pie a tener condiciones para poder invertir en distribución de energía. Se está, pidiendo un préstamo por cerca, de 3 mil 300 millones de pesos para generar una inversión de 8 mil millones de dólares.
Es el, equivalente a la inversión extranjera de los últimos 10 años en el Estado. Y para que se den una idea, los 8 mil millones de dólares que se generarán en inversión extranjera directa en el Estado es el equivalente al presupuesto inicial de la refinería Dos Bocas, que por cierto, sigue sin refinar.