Miguel Ángel Flores/Lo bueno, lo malo y lo peor
LO BUENO
El partido Movimiento Ciudadano continúa fortaleciéndose con la integración de más perfiles. La adhesión de la diputada federal Paulina Aguado Romero no solo suma a una legisladora a la bancada naranja, sino además, será una fuerte aspirante a la candidatura por la alcaldía de Querétaro y sumará votos al proyecto de consolidación de Movimiento Ciudadano como una de las tres fuerzas políticas de mayor representación en el estado, quitando el puesto al PRI que peleará por no perder más posiciones.
LO MALO
El PAN perdió a una mujer con futuro político y la baja representará también, una competencia no planeada en la contienda electoral por la presidencia municipal de Querétaro, es decir, una candidata (si llega a las boletas) que no tenía en mente su excompañero de partido y colega en el Congreso, el aspirante a la alcaldía capitalina Felipe Fernando Macías Olvera. Paulina Aguado podría restarle votos al PAN y eso ya lo advirtieron varios panistas que saben que la lealtad política no distingue colores.
LO PEOR
Varios políticos, en el afán por buscar trascender en su carrera política buscan en otros partidos las oportunidades que no tuvieron en los institutos políticos donde surgieron. Ejemplos hay muchos y citarlos nos llevaría decenas de páginas. Para el elector, la política se ha transformado y los partidos han dejado de ser la institución que define la ideología de sus militantes, ello ha permitido una antes impensada alianza entre PRI y PAN; pero también, una mudanza de políticos de un partido a otro.