La participación ciudadana en las acciones de Gobierno ha sido un tanto ajena a los ciudadanos mismos, pues con el tiempo se ha visto que pocos son escuchados y atendidos en sus necesidades formando parte de planillas, comités, consejos o asociaciones de colonos.
Existen instituciones creadas para agrupar esas necesidades y poder programar su atención, tales como los colegios de profesionistas o cámaras empresariales según su giro; sin embargo, sigue quedando un amplio sector de la población que poco o casi nada ha visto atendidas sus necesidades. Aclaro que no es lo mismo escuchar que resolver. Vienen tiempos electorales y con ello grandes oídos de diferentes políticos, con sus mejores cualidades histriónicas, tomando nota de todas las necesidades de la gente, algunas muy personales y otras que podrían dar origen a interesantes propuestas que harían una diferencia en la vida de muchas personas.
Hoy día, la participación social se ha abierto un espacio en las redes sociales, ahí se encuentran desde las más absurdas quejas o anónimos reclamos, hasta temas dignos de análisis y debate. Lo importante es y deberá ser: construir, colaborar y aportar.
El ámbito académico tiene mucho que aportar, pero contadas son las ocasiones en que hemos visto colaboraciones universitarias en materia de obra pública, planeación, diseño o gestión. Entre más puntos de vista se tengan, mejor será la solución propuesta.
Debe adoptarse una perspectiva incluyente, considerando primordialmente la necesidad y aportación ciudadana, vincularla con la académica, profesional y finalmente desarrollar todos los proyectos de ingeniería que se requieran, alejando egos o tintes políticos.
Me permito invitar a las autoridades a cambiar el esquema de planeación y gestión de obra pública, ya no son los tiempos en que el titular de Gobierno tenía la última palabra; hoy debe incluir las visiones de profesionistas y especialistas, no solo en construcción, sino también en materia de protección civil, planeación urbana, movilidad, gestión ambiental y todas aquellas especialidades que aporten a los proyectos, para que el maravilloso Querétaro deje de ser un tema de discurso y poco a poco se vuelva una realidad.