Requiere sector industrial de Querétaro proteger los ecosistemas: Úrsula Parrilla

Se requiere un marco legal para las empresas cuiden los ecosistemas, dijo Úrsula Parrilla, directora regional de la UICN

Juan Carlos Machorro

En entidades como Querétaro –que cuenta con una presencia importante de empresas– se requiere un marco jurídico para que las compañías protejan los ecosistemas, afirmó en entrevista Úrsula Parrilla, directora de la Oficina Regional de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En México, se tiene documentado que un 50 por ciento de los ecosistemas del país han sido afectados, agregó la experta, quien ejemplificó la pérdida de 212 mil hectáreas de bosques en la pasada década.

“Estamos en contra de la industria contaminadora que provoca explotación regional y hacemos un llamado para establecer un marco jurídico que inculque la restauración integral del paisaje de entidades con gran presencial de empresas”, detalló la encargada de la UICN para México, América Central y el Caribe. Una de cada cuatro especies de la biodiversidad nacional puede extinguirse por causa del hombre en 30 años; en la última década aumentaron en 27.7 por ciento las especies en peligro de extinción en el país, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

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Por otra parte, Úrsula Parrilla subrayó que la pandemia debe concientizar sobre la biodiversidad, pues comentó que acabar con los ecosistemas es tan perjudicial para las especies animales como para el hombre.

“(La pandemia) deja una lección: el hombre tiene gran dependencia de la naturaleza y se deben proteger los ecosistemas de fenómenos como el cambio climático, la minería, los incendios, la sequía, la frontera agrícola (la agricultura registra pérdidas de 13 mil millones de dólares por la afectación ambiental), presiones urbanas, etcétera”, dijo.

Sin embargo, en México, el presupuesto de 2020 de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), encargada de cuidar el 22 por ciento del territorio, solo alcanzaba para destinar unos 10 pesos por hectárea natural.