Las vacaciones de los hijos han concluido y es tiempo de su regreso al salón de clases. Aquí diez recomendaciones que bien pueden ser tomadas en cuenta por padres de familia y maestros:
- Tenga la preferencia de escuchar a sus hijos antes de llenarles de extremas advertencias. El ingresar a una escuela o grupo nuevo, siempre genera una reacción de ansiedad adaptativa. Los primeros días pueden ser significativos para un fracaso escolar.
- Recuerde que la escuela no es la casa familiar y ésta no es la escuela. Los hijos llegarán más motivados si aprovecharon la vacación para muchas otras cosas que el estudiar o repasar tareas no cumplidas el año escolar anterior.
- Las reglas deben quedar claro: llegar puntual, salir a tiempo, no dañar los muebles escolares, no pegar a otros niños, no gritar, cuidar los útiles escolares, no robar, entre muchas otras reglas. Pida a la autoridad que le entregue el reglamento de su escuela.
- La siguiente recomendación, es que la anterior le debe quedar claro a sus hijos. Así que dese tiempo en platicarlo con ellos una y otra vez.
- Para que ellos no le hablen en “el tono en que lo hacen”, evite usted gritarles. La paciencia, el respeto y la tolerancia son actitudes de crianza y no de educación escolarizada y su mayor expresión es cuando socializan. Debe usted transmitir la empatía y la inclusión y para ello debe poner el ejemplo.
- Considere el facilitarles una tableta para el aprendizaje, sobre todo el uso de un programa de texto, pues lo importante es la producción de escritos de su propia autoría. La CNTE está adelantando el futuro en el que, el proceso de enseñanza-aprendizaje, el maestro ante el pizarrón, será un personaje obsoleto.
- No se espante del nuevo lenguaje de los chicos. Las palabras serán sus nuevos juguetes y el propósito es que sean creativos y se diviertan. Tome usted clases del idioma chidísimo.
- Pida a las autoridades escolares que la actividad física no sea de recreo ni de castigo, sino una materia más a la que hay que dedicarle el tiempo y esfuerzo necesarios. Las olimpiadas europeas de 2024 no están tan lejos como usted cree.
- No deberá preocuparse por las drogas, el sexo, la violencia u otras conductas antisociales si usted “acompaña” a sus hijos en la escuela. No me refiero a que lo lleve a la puerta de entrada y lo recoja a la hora de salida. “Acompañarlos” es escucharlos, dialogar con ellos, saber cuáles y cómo son sus compañeros y la opinión que tienen los demás sobre él.
- No olvide llevar a sus hijos bien desayunados a la escuela. La falta de alimento es más dañino que la clase de sexualidad que recibirán. Pida apoyo en estos casos si usted se encuentra limitada para atender la nutrición de sus hijos y si desconoce algo de sexualidad, pregúntele a ellos.
Por: Juan Carlos García Ramos, Psicólogo Clínico
Profesional colegiado: www.coepsique.org