Los científicos sabían que tras la epidemia del SARS en 2003 vendrían otras, pero lamentablemente no hicieron nada para evitar la catástrofe
Pedro L. Jáuregui Ávila
Nadie se imaginó a finales de diciembre del 2019 que el Covid 19, fecha cuando se conoció de su existencia, sería el gran dolor de cabeza del mundo de este 2020 que lleva solo cuatro meses.
Se dice que la pandemia ha afectado, hasta el momento, a más de 2,3 millones de personas en el mundo, mientras que el número de muertos supera la cifra de los 161.000 y la de recuperados, los 595.000.
A simple vista se observa que la primera lección es que estamos frente a otro gran fallo de la versión neoliberal del capitalismo, que tiene en Estados Unidos, al presidente Donald Trump, como el jefe máximo de los payasos sociópatas que gobiernan en el país, que tiene la mayor cifra de personas fallecidas en el mundo, con más de 45.000.
Los científicos sabían que tras la epidemia del SARS en 2003 vendrían otras pero lamentablemente no hicieron nada para evitar la catástrofe y abordarla como se hace con la gripa.
Otro ‘payaso reyezuelo’ es el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien le ha dado por pedir una intervención militar y el cierre del Congreso.
Además pidió que las medidas de aislamiento tomadas por varios gobernadores que tienen como objetivo evitar la propagación del coronavirus, sean levantadas muy pronto, a pesar que el Ministerio de Salud ha dicho que el brote se encamina hacia su auge en ese país.
En Venezuela, el dictador Nicolás Maduro, con el apoyo de Rusia y China ha venido sorteando el problema del Covid 19, pero la escasez de gasolina -agravada durante la cuarentena- y la precariedad del sistema de salud pueden provocar giros, inesperados que pueden desvalorizar en determinado momento lo que ha conseguido.
En Colombia, las medidas tomadas por el Gobierno de Iván Duque, han ‘controlado’ el crecimiento de la pandemia, aunque existe una presión para poner a funcionar el aparato productivo no obstante que los expertos consideran que se vienen dos semanas cruciales en la lucha que se vive contra el Covid 19, donde los bancos son, hasta el momento, los grandes beneficiados por las medidas económicas.
