Hoy el promedio de una franquicia en México es de 40 y 45 millones de dólares
Iván Torres
Desde hace unos meses he platicado en este espacio acerca de la relación que se está cocinando entera la FEMEXFUT y la MLS. Bien, el lunes pasado, al anunciarse la llegada de nuevos socios al Club Necaxa se abrió claramente hacia dónde van los objetivos de los clubes mexicanos. La revalorización de sus franquicias, un negocio al que ya están apuntando muchos, sino es que todos los dueños del balón que ya están fincando alianzas de una u otra forma en el mercado estadounidense.
Los nuevos inversores rayos hoy tienen nombres como Eva Longoria (actriz casada con un ex o socio de Televisa, José Bastón), Mezut Özil, estrella del balompié alemán, los dueños del DC United de la MLS, Stephen Kaplan y Jason Levien, multimillonarios accionistas o copropietarios de distintas franquicias deportivas como el Inter de Milán o los 76’s de Philadelphia. Le apuestan a incrementar sus inversiones y potenciar sus ganancias al menos cinco veces de lo que inviertan en estos momentos.
Hoy el promedio de una franquicia en México es de 40 y 45 millones de dólares; en Estados Unidos, la MLS valora, la más pequeña, entre 250 a 300 millones de dólares. Entonces, imagínese amable lector, cuando venga esta fusión entre ambas ligas y lo que implique en pagos de derechos de televisión, comercialización, venta de ‘souvenirs’ y mucho más. Las ganancias que espera la familia Longoria llegarán a las alturas en menos de tres años. Los clubes mexicanos hoy en día tienen áreas ejecutivas para dar el siguiente paso. En Gallos no es la excepción y ya se están moviendo hacia los beneficios que traerán los pamboleros del norte. El primer paso está dado.
