Robert O. Harmsen
El 8 de septiembre, la ONU celebra el día de la alfabetización – la capacidad de leer y escribir. A nivel mundial cerca de 800 millones de personas son analfabetas. Además, en países de ingresos bajos y medios el número de niños de 10 años que no saben leer y comprender un texto sencillo ha incrementado de 57% en 2019 a 70% en 2022.
Para mí, como educador, esto es preocupante. Cualquier ser humano debería poseer este derecho y capacidad tan elemental. Imagina a todas esas personas privadas del placer de leer una novela o un periódico. Se supone que todos los individuos deben saber cuáles son sus derechos y obligaciones, los cuales normalmente están escritos, ¿cómo es que van a saberlos ahora?
Históricamente, la humanidad no necesitó un lenguaje escrito para comunicarse, ni para sobrevivir. El lenguaje hablado era un medio por sí mismo. Sin embargo, nuestras sociedades evolucionaron y sabemos que algunos de los primeros textos escritos se encontraron en Sumeria alrededor del año 3400 a.C. Hemos progresado mucho desde entonces y a medida que nuestras sociedades se desarrollaron, el lenguaje escrito evolucionó con ellas.
Evidentemente aún hay que mejorar y facilitar el acceso a instituciones para alcanzar una tasa de alfabetización del 100%, lo cual todavía es un reto durante esta época. Sin embargo, desde el punto de vista opuesto, más de 7,000 millones de personas saben leer y escribir, y si usted está leyendo esto, forma parte de ese 90%, ¡Enhorabuena!
MT