La insaculación es formal de nombre, una pretensión falsa de seriedad. Sólo festejó de manera forzada Noroña, en realidad fue trágico, doloroso, adverso a cientos de juzgadores de carrera que están condenados a perder su trabajo y a ser duramente criticados por tomar, supuestamente, malas decisiones guiados por la corrupción. Libera de toda responsabilidad al gobierno y al partido en el poder, al institucionalizarse la chiripa, porque en los hechos, no hay a quien reclamarle. Ese es nuestro futuro, no es el destino, ni Dios, ni nuestra voluntad, es lo que decida el privilegio de quienes ejercen, la suerte.