Los retos por venir: Roberto Mendoza

Roberto Mendoza

Pareciera que la prisa por legislar las ya casi 20 leyes que se han aprobado en el congreso son un trámite que el gobierno de la presidenta tiene que saldar con el régimen que acaba de terminar. La presidenta está presionada por cumplir con las promesas y la palabra empeñada y lo está haciendo a toda velocidad. ¿Qué pasará cuando termine de cumplir con el compromiso que hizo con López Obrador? ¿Cambiará a varios secretarios de Estado, a los coordinadores de las bancadas legislativas?

El próximo año será un desafío de máxima tensión política y comenzará pronto, el 20 de enero toma protesta Donald Trump y ha dicho que desde el primer momento deportará a miles, quizá millones de migrantes ¿Vendrán todos a México? Poco después y quizá sin resolverse esa crisis, el país entrará en una elección innecesaria, el 1 de junio se elegirán jueces y ministros federales en unos comicios sin precedente ¿Qué pasará si la elección sale mal? ¿Qué tanta legitimidad tendrá estas personas juzgadoras? ¿Tendremos mejor o peor justicia federal? No va a cambiar nuestra justicia cotidiana, los jueces locales no serán electos por nosotros y tampoco se acabará con la corrupción.

Suenan los tambores de una guerra mundial, una posible crisis económica internacional, dependiendo de la fecha, sequías o lluvias torrenciales, ¿sismos? ¿Otra Pandemia? ¿Claudia Sheinbaum está preparada? La respuesta es no. Nadie está preparado y como cualquier mandatario tendrá que tomar decisiones claves frente a crisis insospechadas, para ello es imperativo que tenga todo el poder y el respaldo no solo de 36 millones de mexicanos, sino de todos, ya vivimos un sexenio con un mal líder que nos dividió, la presidenta tiene todavía un bono de confianza, ojalá no lo desperdicie enfrascándose en luchas imaginarias y rencores mal entendidos contra enemigos hoy ya derrotados. Si ella nos cumple con la velocidad con la que está trabajando, seguro todos la vamos a apoyar.