Rubén Garnica Monroy*
Nuestra institución, consciente de la emergencia climática, ha elaborado un plan con acciones específicas de mitigación, adaptación, educación, investigación y vinculación llamado ‘Ruta Azul’. Como parte de este plan, nuestro campus está realizando cambios que ayudan a la reducción del consumo de recursos escasos, como el agua, y al aprovechamiento de los recursos naturales renovables, como el viento y el sol, además de cambios de comportamiento de todas las personas que lo habitamos.
Como parte de la ‘Ruta Azul’, en Querétaro, se está desarrollando un plan para tener un campus sensible al agua. Es decir, a partir de lo ya existente y utilizando Soluciones Basadas en la Naturaleza (NBS, por sus siglas en inglés) principalmente, diseñar un sistema de circularidad del agua. La propuesta considera primeramente la captación del agua de lluvia (cuando sea posible) en los techos de los edificios y colocando cubiertas en áreas de estacionamiento con el propósito de poder almacenarla y aprovecharla. A la par, se propondrá que, en los espacios abiertos, haya vegetación nativa, cuyo consumo de agua es de acuerdo a nuestro clima. También se buscará que el agua de lluvia que no pueda ser captada sea infiltrada al suelo.
El proyecto es una gran oportunidad para el aprendizaje, replicable dentro y fuera de la institución, encaminado y construyendo alternativas que respondan tanto a los retos locales, como a la crisis climática global.
* Profesor Asistente. EAAD Tecnológico de Monterrey
MT