De manifestar una posible controversia constitucional de una norma que es rechazada no solo desde la sociedad civil, sino por la comunidad jurídica, observamos el doble discurso

Sergio Arellano

No cabe duda de que la historia cambiará de acuerdo al contexto. De manifestar una posible controversia constitucional de una norma que es rechazada no solo desde la sociedad civil, sino por la comunidad jurídica, observamos el doble discurso.

La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quedó al descubierto. Circuló en redes una cara triunfalista, confiada y sarcástica de este Gobierno; no un video como cualquier otro. Con actos penosos como este, se expone con absoluta claridad el respaldo de la Administración del presidente Andrés Manuel López Obrador a las viejas prácticas y, en este caso, a Jaime Bonilla.

Hay que recordar que para alinear los procesos electorales, su periodo como mandatario en dicha entidad duraría dos años, que quiere prolongar con tres más. Una vez transitada la jurisdicción de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, será la Suprema Corte de Justicia de la Nación quien determine la procedencia o no de lo que el Congreso de Baja California aprobó en términos generales en una reforma al artículo 8 de la Constitución local. Las fuerzas políticas y el propio ministro Arturo Zaldívar han expresado que la última decisión partirá de las instancias jurisdiccionales correspondientes y no por una inclinación o preferencia de algún grupo dominante.

Algo que me parece sorprendente es que un asunto tan delicado se quiera resolver con una consulta pública; cuando hemos visto que en la implementación de este tipo de mecanismos se cuenta con conclusiones apócrifas, carentes de certidumbre.

Actuemos conforme a derecho y con los criterios establecidos por la jurisprudencia en cuanto a las atribuciones de la Federación, los estados y municipios. Un tema ampliamente discutido ha sido la contraposición de principios dentro de la convivencia en el marco del pacto federal; en lo subsecuente y como parte de la estrategia legal, valdrá la pena esperar el fallo y el precedente de nuestro máximo tribunal para evitar esta clase de desacuerdos.