Dentro de las mayores objeciones al trabajo virtual se encuentra que sobre el ahorro de tiempo de transporte se presenta un incremento en el trabajo
Seth Pérez Melesio
Todas las organizaciones que han optado por pasar parte o su operación a la forma virtual enfrentan nuevos retos y problemas como un nuevo síndrome de burnout, diferentes tipos de presiones, acoso y hasta los problemas en casa que afectan a las empresas. Los efectos en la productividad o mayores costos aún no los podemos cuantificar y en muchos casos aún no han sido socializado para manejarlos. ¿Como identificar y medir algunos nuevos problemas virtuales?
Dentro de las mayores objeciones al trabajo virtual se encuentra que sobre el ahorro de tiempo de transporte se presenta un incremento en el tiempo de trabajo pero ahora frente a una pantalla. Los principales reportes de colectivos y organizaciones especializadas mencionan que la permanencia de tantas horas continuas frente al monitor deriva en una caída en la productividad si no se realizan algunas pausas. El problema mayor se genera cuando las personas llegan a un estado de ‘truene’ o mejor conocido como el burnout. ¿Cómo identificarlo y que consecuencias tiene?
Lo complejo para las organizaciones es que los nuevos canales y formas de comunicar oculta problemas que pueden ser mayores. Los cuestionarios de recursos humanos son rebasados por la realidad y no hay personal en cantidad ni preparación para contactar a las personas de manera remota para conocer sobre su estado emocional o en concreto sobre la salud mental. El reto será comunicar y registrar estos nuevos fenómenos. ¿Usted identifica alguno de estos nuevos problemas en su organización?
MT